Publicada el 2006-01-18
Hay actividad. Después de más de tres años de abandono en los que el edificio se ha sumido en ruina, el antiguo cine Ideal ha vuelto a abrir sus puertas. Y lo ha hecho para que entraran los obreros.
Han comenzado las obras de rehabilitación de la fachada del viejo inmueble de la avenida de la Constitución. Costarán 85.000 euros y consistirán en la rehabilitación integral de la fachada del inmueble. Además los trabajos incluyen el refuerzo de la estructura interior del inmueble, actualmente vacío para evitar desplomes de los elementos ornamentales.
No hay un plazo de ejecución, porque las catas previas a los trabajos pueden prolongar o acortar el tiempo final de la restauración, pero expertos municipales estiman que el tiempo no será inferior a cuatro meses y confían en que tampoco sea superior a seis. “Esperemos, –señalan las mismas fuentes– que para Hogueras la fachada reluzca como un San Luis y podamos retirar el andamiaje y la red de protección”.
La propiedad del inmueble solicitó hace unas semanas licencia para dar comienzo al inicio de las obras. Una licencia que al parecer ha sido concedida este mismo lunes.
Los trabajos de rehabilitación de la fachada del antiguo cine Ideal obligarán a ocupar, de forma continuada y mientras se prolonguen las obras, buena parte de la acera de la avenida de la Constitución, reduciendo así la zona peatonal de un área muy transitada para evitar cualquier tipo de incidente o el desprendimiento de parte de la fachada.
Cuando concluya el aseguramiento de la estructura del edificio, catalogado como edificio protegido, quedará por conocer su destino y uso definitivo. Los propietarios no han hecho público aún el futuro del inmueble, después de varios intentos impopulares como la posibilidad de que albergara una macrodiscoteca o locales de ocio.
Las antiguas instalaciones del cine Ideal han cumplido ya los tres años de cierre al público y abandono. Hay que recordar además que los problemas de mantenimiento y mal estado del inmueble comenzaron incluso antes de que los antiguos dueños del cine cerraran sus puertas al público. El Ayuntamiento lleva años ordenando su reparación y acometiendo pequeñas reparaciones de urgencia de forma subsidiaria e incluso cerró la calle Artilleros ante el riesgo de desplome
Fuente: Las Provincias