Los estudios recientes sobre el sector de la construcción ponen de manifiesto el final de la recesión de los últimos años y apuntan al inicio de la reactivación. Una reactivación progresiva y sana de un sector que apuesta por la innovación y la sostenibilidad.

Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), el volumen total de facturación de la construcción en 2014 superó los 100.000 millones de euros, con un notable incremento de la inversión por parte de las administraciones públicas y la licitación oficial, que creció un 42,9% y una tasa de actividad negativa del -1,5%, una caída mucho más suave de la esperada. Por todo ello se vislumbra el final de la recesión vivida por el sector durante los últimos siete años.

Para los expertos el momento actual representa un momento de estabilización y crecimiento moderado y la previsión para el sector en 2015 es del 5%. Un sector que la crisis ha castigado con dureza y que ha afrontado las adversidades evolucionando hacia una mayor tecnificación.

El renovado Salón Internacional de la Construcción de Fira de Barcelona, Beyond Building Barcelona-Construmat, ha cerrado recientemente su 19ª edición mostrando los vectores que marcarán el futuro de la construcción del siglo XXI: la innovación, el diseño, la sostenibilidad y la rehabilitación.

Según el arquitecto Jaume Domènech, director de Construmat: La construcción sostenible ha llegado para quedarse. Tenemos un reto como sociedad ya que se prevé que en 2030 el 80% de la población mundial vivirá con unos recursos naturales muy limitados y debemos construir de manera responsable, para dejar la mínima huella posible.

Para el profesor Gonzalo Bernardos, analista y consultor económico e inmobiliario: Es importante y necesario concienciar a la población sobre la construcción en madera. La crisis ha servido para innovar y encontrar nuevas formas de construcción y hoy damos una importancia a la madera que no dábamos hace una década, pero todavía hay muchas personas que desconocen sus enormes ventajas: la huella ecológica cada vez es más importante y la madera es el único material constructivo 100% renovable, con un gran ahorro de emisiones de CO2 frente a otros materiales.

La Banca Ética también apuesta por la construcción sostenible, financiando hogares a precios muy económicos. El stock de viviendas construidas y a medio construir anterior a la crisis, ronda las 500.000. Por eso la rehabilitación se hará imprescindible en los próximos años y la madera, que en materia de rehabilitación se utiliza mucho en otros países europeos, será clave en nuestro país a corto plazo.

FUENTE: EL ECONOMISTA